Bremen tiene muchas caras. La ciudad hanseática es el corazón pulsante del noroeste de Alemania y hogar de los mundialmente famosos músicos de Bremen. Una gran ciudad con muchas facetas, donde la historia, la tradición, la ciencia, la naturaleza y la cultura se combinan para formar un fascinante cuadro general.

Como ciudad episcopal y asentamiento de comerciantes, la historia de Bremen se remonta al siglo VIII. Junto con Bremerhaven, es el estado federal más pequeño de Alemania y es una metrópolis muy animada. Aquí la tradición se une a la modernidad, la calidad de vida urbana se une al confort del norte de Alemania. Bremen es la ciudad de las distancias cortas. En ningún otro lugar la historia, la cultura y el estilo de vida están tan estrechamente entrelazados como aquí. El pulso de la ciudad late alrededor de la histórica plaza del mercado. El Roland de piedra, el símbolo de la independencia, está de pie con una vista hacia la Catedral de San Pedro. Junto con el magnífico ayuntamiento, es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Y justo al lado, los músicos de bronce de Bremen están entronizados.

A lo largo de la Böttcherstraße caminamos hacia el paseo Schlachte, donde antaño atracaban barcos de todo el mundo. Clásicos como el Alexander von Humboldt siguen anclados aquí hoy en día. Desde la Schlachte sólo hay unos pocos pasos hasta la Schnoor, el casco antiguo medieval con sus estrechas callejuelas y casitas que vale la pena ver. ¿O qué tal un paseo a lo largo de la milla de la cultura? Visite la internacionalmente conocida Kunsthalle o haga un corto viaje al espacio en Airbus. Por cierto, vale la pena descubrir Bremen en bicicleta, donde se puede hacer una pausa relajante en amplias zonas verdes o en parques idílicos.

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